El presidente de la Confederación Argentina de Mutualidades, licenciado Alejandro Russo, formuló declaraciones con respecto a un hecho delictivo que se registró en la Mutual Altos del Chipión, en la provincia de Córdoba, donde el gerente de la entidad, Lucas Martín Priotti, cometió una estafa que rondaría los 30 millones de pesos, según lo informó el fiscal de San Francisco, Bernardo Alberione. El autor del hecho está desaparecido.
Los datos obtenidos por este medio indican que la mencionada mutual despidió y denunció penalmente a su gerente, Lucas Martín Priotti, luego de detectar maniobras fraudulentas con los depósitos de sus asociados.
La pequeña localidad cordobesa de Altos de Chipión, una comunidad de 2.225 habitantes, ubicada a 219 kilómetros de la capital provincial, se encuentra conmovida por este episodio.
El acusado es un hombre de 38 años oriundo de la localidad, cuyo paradero se desconoce. Desapareció la semana pasada, cuando debía entregar el dinero a dos productores de la zona que estaban por cerrar negocios inmobiliarios.
Sobre este lamentable episodio, el licenciado Russo expresó que “estamos hablando de una maniobra de un delincuente, como bien lo planteó el fiscal Bernardo Alberione a cargo de la causa, que ha usado desgraciadamente a la mutual para su negocio personal”.
Y añadió: “Las mutuales son una de las organizaciones que más controles del Estado tienen: Están controladas por los órganos locales provinciales (control primario); por el INAES; por la UIF y la AFIP”.
Ante la consulta del periodismo, en el sentido de por qué con tantos organismos que ejercen control se genera este tipo de hechos, el titular de CAM respondió trayendo a la memoria el caso Fendrich: “Nadie duda del Banco Nación, de la honorabilidad del banco; nadie duda de los mecanismos de control que tuvo el Banco Nación, pero un día un funcionario del banco hizo ese robo. En este caso pasa exactamente igual, el Consejo Directivo de la Mutual hizo la denuncia penal correspondiente contra ese gerente que robó”.
Acerca de lo sucedido en la mutual, el licenciado Russo relató que “el dinero no ingresaba a la mutual, ingresaba a los bolsillos de este gerente. La entidad cumplía con todas las cuestiones técnicas, con todos los procesos de auditoria… pero había un empleado que defraudó a la entidad y a su vez a sus asociados”.